
ESTRIDOR EN EL LACTANTE Y LARINGOMALACIA
Dr. Matías L Álvarez Baeza
Otorrinolaringólogo
Comité de Vía aérea Pontificia Universidad Católica de Chile
Hospital La Florida
Socio SOCHIORL
¿Qué es el estridor?
Los ruidos respiratorios en recién nacidos y lactantes incluyen el estridor, estertor, ronquido, cornaje, entre otros. Estos requieren especial atención dado que la mayoría son patológicos.
Estridor corresponde a un ruido respiratorio áspero de frecuencia aguda, que implica obstrucción del paso de aire en la laringe o tráquea.
El estridor es un signo de una condición que puede ser aguda, crónica, aguda sobre crónica; y puede ser congénito o adquirido.
Según la localización de la estrechez puede presentarse en la inspiración, espiración o en ambas fases (inspiración y espiración)
¿Cuáles son las principales causas de estridor?
Las causas de estridor dependerán según la edad de presentación, forma de inicio y temporalidad del ciclo respiratorio. Sin embargo, de forma global las principales causas son: Laringomalacia, Estenosis subglótica, Parálisis de cuerdas vocales, Hemangiomas laríngeos, Quistes laríngeos, Traquebroncomalacia, sinequias laríngeas, entre otros.
¿Qué debo hacer si pienso que mi hijo/hija tiene estridor?
En el caso de sospechar un ruido respiratorio anormal en el lactante, es de vital importancia acudir a consulta con especialista otorrinolaringólogo, para así evidenciar que tipo de ruido es y las repercusiones que podría tener. Dentro de los signos de alarma asociados a estridor se encuentran: dificultad en el acople o alimentación, fatiga al alimentarse, crisis de cianosis (coloración azulada), caída en la curva de crecimiento o peso. Es de utilidad en ciertas ocasiones realizar una videograbación del ruido para así ejemplificarlo al especialista.
¿Cuáles son los métodos de estudio?
El principal método diagnóstico es la videonasofibroscopía. Este examen es seguro y confiable desde recién nacidos, se realiza con el paciente despierto, no requiere ayuno ni sedación y otorgando una visión integral de la vía aerodigestiva superior.
Ocasionalmente se pueden requerir estudios complementarios tales como estudio del sueño (poligrafía del sueño/polisomnografía), evaluación endoscópica funcional de la deglución y/o videofluoroscopia; y en casos que lo ameriten microlaringoscopía y broncoscopía rígida en pabellón.
¿Qué es la Laringomalacia y como se diagnostica?
La Laringomalacia es la causa más frecuente de estridor en pediatría (60%), se suele presentar con una incidencia de 1 en 2.000-3.0000.
Se origina por el colapso de las estructuras laríngeas sobre las cuerdas vocales (supraglotis), este colapso ocurre en inspiración y se piensa que es secundario a la inmadurez central del control neurológico sobre el tono laríngeo.
Se suele presentar durante las primeras semanas de vida, aumentando progresivamente le intensidad del estridor con un peak a los 6 meses, resolviéndose paulatinamente los síntomas en un 90% entre los 12-18 meses de vida.
La sospecha es clínica, pero el diagnóstico es a través de videonasofibroscopía con o sin estudios complementarios. Es de vital importancia objetivar los síntomas asociados para evaluar la gravedad y además buscar dirigidamente reflujo gastroesofágico.
¿Cuál es el pronóstico y tratamiento?
El tratamiento va a depender según la severidad de los síntomas. En el 90% de los casos se presentan con síntomas leves o moderados, los cuales consisten en estridor inspiratorio con o sin síntomas de reflujo (regurgitación, atoros). Estos pacientes requieren manejo conservador que consiste en observación seriada, medidas posicionales de alimentación, asociado en la mayoría de los casos con medicamentos anti reflujo.
En los casos severos, se manifiestan con apneas, cianosis, dificultad respiratoria y/o falla en el crecimiento, siendo necesario en algunos casos mantener con apoyo ventilatorio a la espera de una resolución quirúrgica. El manejo quirúrgico dependerá según el patrón de obstrucción objetivado en la videonasofibroscopía y las comorbilidades, correspondiendo a la principal cirugía la Supraglotoplastía +/- epiglotopexia.
Cuando los pacientes requieren cirugía, se debe realizar en el mismo acto una evaluación de vía aérea con broncoscopía rígida, dado que en un 16-64 % de los niños con laringomalacia, además presentan alguna lesión concomitante en la vía aérea.
El pronóstico global es bueno, sin embargo, hay que tener especial cuidado cuando se asocia a cardiopatías congénitas, enfermedades neurodegenerativas, enfermedades respiratorias y malformaciones cráneo faciales. Estos casos pueden evolucionar desfavorablemente pese al manejo inicial adecuado, incluso requiriendo traqueostomía.
Imagen intraoperatoria de paciente con laringomalacia
Imagen intraoperatoria al finalizar la cirugía de paciente con laringomalacia
Nasofibroscopía de paciente con laringomalacia.
REFERENCIAS
1.- Vijayasekaran S (2020) Pediatric Airway Pathology. Front. Pediatr. 8:246. doi: 10.3389/fped.2020.00246
2.- Carter, J., Rahbar, R., Brigger, M., Chan, K., Cheng, A., Daniel, S. J., ... & Thompson, D. (2016). International Pediatric ORL Group (IPOG) laryngomalacia consensus recommendations. International journal of pediatric otorhinolaryngology, 86, 256-261.
3.- Alvo, Andrés. (2020). The child with persistent stridor. Revista chilena de pediatría, 91(6), 961-967. Epub December 13, 2020.https://dx.doi.org/10.32641/rchped.vi91i6.2115